viernes, enero 28

...

"Siempre supe que es mejor, cuando hay que hablar de dos, empezar por uno mismo..."
En este constante ir y venir mio, en este construirme o destruirme, inventarme o reciclarme, mimetizarme o resaltar resulta inevitable que llegado un punto tenga que detenerme porque termino por no saber realmente como soy, lo que soy o como he sido siempre.
Detenerme no esta mal, lo hago siempre que lo necesito. Hoy es uno de esos días. Las cosas no siempre salen bien ni tienen porqué. La vida es así. Hay circunstancias que escapan a mi poder de transformación y otras que evidentemente solo yo puedo cambiar. 
Sentir frustración o desaliento tampoco es algo fuera de lo cotidiano... lo anormal creo yo es que nunca se sintieran. Así que cuando me siento así respiro hondo y me digo que si he podido soportar y sobrevivir a la pérdida trágica y repentina de los dos seres que más me han amado en este mundo todo lo demás son solo eventos que debo dejar que transcurran.
Hoy no quiero terminar siendo una mexicana a la que no se le nota el acento ( signo de que estoy perdiendo  parte de mi) peor aún me niego a dejar de ser cariñosa y a pedir las cosas "por favor" porque aquí se ve como "peloteo" (nosotros los mexicanos diríamos: hacer la barba) me niego a tutear y llamar por su nombre a mi madre política, yo la llamo "madre"aunque ello suponga que alguno diga que soy pelota, y no es que sea mi madre (que solo tuve una q.p.d.) lo hago como muestra de respeto, de cariño. 
Así soy yo: cariñosa. Quien no sepa recibir muestras de afecto es problema suyo... a mi se me da muy bien ser así.

2 comentarios:

Víctor dijo...

Y al final, esos mismos que ahora recelan de unos cariños altruistas, terminan llorando en la penumbra de las esquinas porque no se sienten queridos.

Milagros Baeza dijo...

...así de complicados somos. Gracias por tu aporte. Saludos y vuelve cuando gustes que siempre es un gusto leerte.