martes, enero 25

Neruda siempre...

La alcachofa
de tierno corazón
se vistió de guerrero
continua...



No se porqué este poema me recordo tu nombre.

2 comentarios:

Víctor dijo...

:-) Construir una fortaleza para evitar el dolor, sin saber que el dolor se aplaca con el cariño de esos mismos seres que mantenemos alejados con nuestras barreras. Una fortaleza es tan fuerte como su punto más debil.

Milagros Baeza dijo...

Ahí, ahí... gracias por dejar tu opinión. ¡Vuelve pronto!